Oportunidad.

El Americanista es un boletín gratuito sufragado por patrocinadores.

Ofrecemos oportunidades de patrocinio a organizaciones e individuos interesados en conectar con un segmento demográfico dinámico, hiperconectado e hiperinformado, arraigado en América Latina.

Audiencia.

Publicamos para el Latam connaisseur . Hombres y mujeres sofisticados; empresarios, inversionistas, altos ejecutivos, profesionales liberales, profesionales de ONG y think tanks, altos funcionarios, diplomáticos, académicos y estudiantes de ciclo avanzado, todos ellos con intereses en la región. Les proveemos de densidad contextual para su toma de decisiones en lo que respecta a Latam.

Contamos con >500 suscriptores, una tasa de apertura de >50%, y una de tasa de baja de suscripción de <0.5%. Nuestros correos se abren 2000 veces por mes.

Total de sesiones en El Americanista según datos de Google Analytics a 1 de octubre de 2021.

Nuestros espacios publicitarios: abiertos, precisos, exclusivos.

Ante la proliferación de paywalls en el ecosistema de los medios y la llamada «fatiga de suscripción», decidimos lanzar El Americanista en abierto. 

Para financiar cada boletín, vendemos espacio publicitario directamente, a la vieja usanza. Creemos que nuestras fórmulas publicitarias no-invasivas son beneficiosas para lectores y patrocinadores.

Cada boletín tiene un patrocinador exclusivo, que figura como tal en la introducción del boletín. También cuenta con un espacio en el cuerpo del texto distinguido del contenido editorial.

Opciones de patrocinio.

Para hablar de precios, formatos y disponibilidad, por favor escríbanos a contacto@elamericanista.com

Nuestros patrocinadores «ofrecen» cada boletín, figurando en el encabezamiento del boletín, distribuido por correo electrónico a nuestros suscriptores, y publicado en elamericanista.com. 

El formato es «OFRECIDO POR [PATROCINADOR] DESDE [LOCALIZACIÓN]».

 Muestra del encabezamiento patrocinado, visualizado desde un boletín recibido por correo electrónico.

 Muestra del encabezamiento patrocinado, visualizado desde un boletín publicado en elamericanista.com.

Además de «ofrecer» el boletín, nuestros patrocinadores optan entre dos tipos de contenidos que insertar en el boletín. 

La primera opción es un mensaje patrocinado, que transmiten directamente a nuestros lectores, interpuesto entre los hilos en el cuerpo del boletín. Los patrocinadores pueden incluir una imagen en el mensaje.

UN MENSAJE DE PAYCADDY

En PayCaddy sabemos que la bancarización de América Latina pasa por las finanzas embebidas. Por ello conectamos a trabajadores y plataformas de la gig economy al sistema bancario mediante nuestra infraestructura digital, facilitándoles la contratación de todo tipo de servicios financieros.

Nuestro socio fundador y CEO Juan Diego Gálvez explica desde su blog la función de las finanzas embebidas en la formalización y el desarrollo de LatAm.

Ejemplo de un mensaje patrocinado, interpuesto en el cuerpo del boletín.

La segunda opción es un hilo patrocinado. Se edita siguiendo el formato de hilos de El Americanista, y se integra en el cuerpo del boletín, así como en su índice («Hilos en este correo»).

HILO PATROCINADO

III. Las finanzas embebidas ya potencian la bancarización de América Latina

342 palabras. 2 minutos de lectura. 3 fuentes.

Por qué importa Las finanzas embebidas permiten a plataformas de la gig economy conectar a sus colaboradores al sistema bancario a través de nuevas infraestructuras digitales, facilitándoles la contratación de servicios financieros.

  • Empresas de transporte como Lyft ya brindan a sus conductores un servicio de cuenta electrónica y tarjeta Mastercard a través del cual estos reciben sus ingresos.

  • Las finanzas embebidas aportan un modelo formal de relación laboral que beneficia a empresa y colaboradores mutuamente. Mediante este tipo de finanzas, las propias plataformas han tomado la iniciativa hacia la plena bancarización y la formalidad, allá donde a la banca tradicional y al estado a menudo les falta capacidad.

En el retrovisor Hasta ahora, los trabajadores de la gig economy debían visitar una sucursal bancaria para abrir una cuenta de ahorro, recibir un crédito personal, una tarjeta de crédito o una hipoteca. Con frecuencia eran—y aún son—denegados por su perfil de riesgo, ligado a su informalidad.

La clave Si en cambio es la plataforma de la gig economy la que trae su nutrida red de colaboradores a la mesa del banco, el volumen se torna interesante para este, cambia el equilibrio de poderes, y se expande el acceso al crédito a los trabajadores.

Cómo funciona Generalmente, los bancos no están capacitados para promover APIs propios. Por otra parte, los APIs deben ser ajustados a los protocolos de seguridad y regulaciones locales. Una nueva generación de fintechs han logrado integrar el sector financiero regulado con la gig economy vía APIs de conexión. En el caso de Lyft, fueron Payfare y Stride Bank quienes establecieron las conexiones necesarias, logrando administrar el flujo de información entre la plataforma y la entidad regulada.

Más a fondo Empresas latinoamericanas como PayCaddy vienen trabajando de lleno en este problema. Fundada en 2018 por tres jóvenes emprendedores—un tico y dos panameños—opera en la cuenca caribeña. Está especializada en construir este tipo de infraestructuras fintech. Juan Diego Gálvez, co-fundador y CEO de PayCaddy, explica desde su blog la función de las finanzas embebidas en la formalización y el desarrollo de Latam.

Ejemplo de un hilo patrocinado integrado en el cuerpo del boletín.

Estamos abiertos a proyectos especiales.

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Ya nos han apoyado.

PayCaddy, Prim Spa y Boardroom Labs.

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